Ir al contenido principal

Despertar

Sé que dije que era mejor que no hablemos durante estos días que te tomarás para pensar, pero créeme que no puedo dejar de decirte lo que siento.

Llegó el momento en el que desperté de ese momento en el que no entendía qué ni cómo pasaban las cosas, creo que ambos estuvimos tan seguros de tener al otro al lado que simplemente cada uno en su momento dejó ir las cosas lentamente.

Pasaron meses y recién reaccionamos, justo antes de que esto pueda morir y bueno, en vez de decirte que eso sería lo mejor, quiero que sepas que no quiero que eso ocurra, quiero que sepas que me encantas y que quiero tenerte conmigo por todos los días que sean posibles. 

La primera vez tú tomaste un vuelo y volviste solo para no dejar que esto se pierda, y yo podría tomar mil vuelos ida y vuelta solo para decirte que no me he cansado de amarte y de sentir que hay muchas cosas que aún nos faltan por vivir. Todas las cosas que hemos imaginado juntos y todo lo que aún queremos, están ahí, solo es cuestión de que ambos pongamos de nuestra parte para seguir y yo te prometo que de mi lado será así... haré todo lo que sea necesario para no perder a mi chico, a la persona que apareció para mostrarme lo lindo de estar con alguien y cuidarnos mucho entre los dos, entendernos y a pesar de nuestro carácter entendernos hasta calzar súper bien como ahora.

Nadie podrá entender cómo funciona esto y nadie te hará sentir esto que solo tú y yo tenemos, dormido o no, pero créeme que nada ni nadie puede sobrepasarlo. Este mensaje no es para que me respondas que sí quieres seguir intentándolo, en realidad es solo para que sepas de lo que estoy dispuesta hacer para no dejarte ir, este es mi momento de intentarlo hasta el cansancio, no puedo permitírmelo, en serio.

Por todas las risas, abrazos y sustos con cara de demonio, por todas las sonrisas y las palabras de aliento, por cuando nos tomamos de la mano para darnos seguridad, por todo eso y más te escribo esto.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Hasta Siempre.

Tu peculiar sonrisa y esa forma de ser tan increible, aquellos aretes innovadores, ese color de uñas tan descabellado, esos tatuajes tan extraños que reflejaban tu personalidad, tus lentes inmensos que tapaban aquellos ojos caramelo, tus ocurrencias .... todo quedo en el aire. Sin saberlo una noche de diversión se convirtió en el más frio enemigo, esa cruel madrugada donde la sonrisa se borro de tu rostro, y te quedaste ahí... En un sueño profundo, del cual ya nadie te podrá despertar. Recuerdo aún la primera vez que te ví, sonriendo como de costumbre, con esas ocurrencias y la famosa frase "No entiendo" que te caracterizaba. Eras tan tierna, inocente y loca al mismo tiempo que, esas cosas te hacían y te hacen muy especial para mí, y todos los demás. Nunca olvides que nos tendrás ahí siempre. Nunca olvides que nunca te olvidaremos Nunca olvides que te recordaremos por lo buena y linda que eras. Estés en donde estés, se que estas feliz y en este mismo momento sonríes Al

Mágico.

Bajo el leve susurro del viento, bajo la luz tenue de la luna, tras el sonido eufórico de una batería y luego de una sonrisa tuya, me pregunto como es que tienes la magia para hacerme feliz. Era una persona normal, con sonrisa dibujada por la costumbre, haciendo reir a los demás para compensar mi vacío, ocultando mi verdadero sentir... De pronto mágicamente apareciste, aquella sonrisa perdida... volvió y ya no era parte de la costumbre, era mas bien símbolo de alegría. Habías hecho que los días dejaran de ser comunes, y se conviertan mágicamente especiales. Eres aquel mago que hace que de las tristezas afloren sonrisas y que las sonrisas sean aún mas grandes. Un mago que logró que mi camino vaya en orden.... aquel mago que acepta mi jodida forma de querer. Ese mago, ese mago eres TÚ . Es necesario que diga que te adoro por ser tan mágico?

Aquel libro.

Repetir lo vivido, hablar de la misma manera dar el mismo amor, abrazar de la misma forma decir las mismas frases. Adorarla cada vez que la veas, perderte en su mirada, tocar el cielo con las manos, sonreir con cada tontería. Repetir la corrección de una palabra mal dicha, renegar con cada capricho, repetir el nombre muchas veces, decir te adoro, te quiero, te amo ... desde el corazón. En la sombra de las palabras pronunciadas, de un libro ya escrito te atreves a abrirlo y cortar partes para pegarlas en un nuevo archivo. No te atrevas a dejar la misma frase pegada en nuestro libro, no te atrevas ni a dejarme tus recuerdos, de recuerdo. La página esta arrancada.